CAPI7ÁN

Cualquier persona que sepa algo de fútbol sabe que Cristiano Ronaldo es uno de los mejores jugadores que este planeta ha visto, y para muchos el mejor. Sólo algunos forofos de otros equipos o jugadores (muy seguidores de la filosofía del cortacésped de Qatar) se atreven a negarle su inmenso talento,aunque en el fondo lo saben y solamente su envidia les impide ver o admitir la realidad.

En una temporada en la que el astro portugués estaba ya condenado al retiro, algo que lleva pasando desde hace varios años, el siete blanco promedia ya casi un gol por partido. En sus últimos encuentros  ha cosechado varios dobletes y un hat-trick, siendo una de las claves de la buena racha del Madrid.

Cristiano ha vuelto después de un comienzo de Liga desafortunado en cuanto al gol se refiere (teniendo en cuenta su injusta sanción que le impidió jugar las primeras cuatro jornadas cuando su equipo más lo necesitaba). Poco a poco más gente va dándose cuenta de que Cristiano sí aparece en los momentos decisivos.

No hay jugador de fútbol más criticado que Cristiano. Es el problema de ser el jugador más mediático, jugar en el Real Madrid, haber ganado tres de las ultimas Champions (dos consecutivas), llevar a tu selección al éxito, y haber ganado los últimos Balones de Oro cuando se suponía que estábamos en la era de otro jugador.

Cristiano tiene poco que demostrar futbolísticamente, habiendo ganado todo tanto colectiva como individualmente con el Manchester United y el Real Madrid en las dos ligas más grandes del mundo y haber llevado a Portugal al éxito europeo. Aún así, hay algo que se suele decir para desprestigiar al jugador de Madeira : su supuesto egocentrismo.

Aunque ninguno de sus compañeros ha dicho nunca nada en contra de él, siempre se le acusa de pensar en sí mismo y preocuparse más por estadísticas individuales que por el bien del equipo. Sus gestos de frustración debido a sus altos niveles de exigencia, tanto con sus compañeros como consigo mismo, son comúnmente utilizados para dar fuerza a esta teoría.

En este último partido de Liga contra el Alavés, Cristiano volvió a cerrar bocas tanto con sus goles como con sus acciones, estas últimas desbancando cualquier debate acerca de su supuesto egoísmo. Primero le dio el crédito de su primer gol a Benzema, jugador muy atacado por el público del Bernabéu que había sido previamente silbado al fallar una ocasión de gol. No es la primera vez que el luso sale en defensa del jugador galo con el público madridista, ya habiendo reprimido los silbidos anteriormente pidiendo aplausos.

Los gestos de Cristiano con su compañero y amigo no acabaron ahí. En los últimos minutos del encuentro, Gareth Bale fue la víctima de un penalti claro y el balón se encontraba en los once metros listo para ser golpeado. Ronaldo tenía la oportunidad de conseguir su hat-trick número 50 aumentando así uno de los récords que posee. Sin embargo le cedió la oportunidad a Benzema, que nunca había lanzado un penalti oficial con el club blanco, para que pudiera conseguir un gol y recuperar la confianza perdida.

Cristiano en este partido llevaba el brazalete de capitán por las bajas de Ramos por sanción y Marcelo por lesión, y no lo pudo llevar de mejor manera. Incluso cuando no lo lleva, siempre ha sido y es un líder dentro y fuera del vestuario, y uno de los jugadores que más se preocupa por el bienestar del grupo y del equipo. Sabiendo el mal momento que está pasando Benzema y la importancia que su juego trae al equipo y al propio Cristiano, sacrificó sus récords y números personales para levantarle el ánimo y al mismo tiempo pedir a la afición que se reconcilie con él.

Cristiano sabe mejor que nadie que cuando uno está en momentos bajos, lo que hace falta son ánimos y apoyo de los tuyos, y no que te tiren más tierra encima. Muchos madridistas deberían aprender de sus acciones y de su ejemplo. El apoyo y el ánimo no van en contra de la exigencia ya que no hay nadie en el mundo más exigente que Ronaldo.  Cristiano ya no es sólo el mejor goleador o el mejor jugador, también el mejor compañero y mejor madridista. Cristiano es (sin quitarle méritos a Ramos o Marcelo) un gran capitán, y un mejor amigo.

Roi Tubìo

@Roi2bo