Siguiendo con lo de Ramos

Si me conocen un poco sabrán que siempre he tenido admiración por Sergio Ramos. Quizá he evitado escribir un poco sobre toda la situación que le rodea porque sé que la admiración que le llevo podría interferir en lo que escribo pero trataré de ser lo más objetiva y expresar mi pensar.

A lo largo de los años, he admirado la entrega de Sergio Ramos. Me parece un jugador que suele dejarlo todo en la cancha, al punto a veces de engancharse en cosas que lo hacen reaccionar más con el corazón y la pasión que con la cabeza. La décima para todos fue un momento inolvidable (para mi tuvo un sabor especial por el papel que Ramos jugó tanto en la eliminatoria como en la final).  Mi admiración tampoco me hace ciega de ver sus errores. Al comenzar la temporada pasada su rendimiento no era el mejor; sin embargo, ya es sabido que los comienzos de temporada no suelen dársele muy bien a Sergio. Pensé que su rendimiento mejoraría tremendamente al avanzar la temporada y debo aceptar que eso no pasó. Aunque debo reconocer que asumió riesgos importantes como jugar en posiciones que no son su fuerte, algunos alegan que esto es porque quería jugar a toda costa. Yo no lo veo así, yo creo que es un jugador valiente que acepta cualquier reto que se presenta sin miedo a caer en fracasos. No le salió bien y mucha gente empezaba a criticar su rendimiento, a asociarlo con Iker y a acusarlo de ser un mandamás del camerino.

Luego comienza la disputa por su contrato. La gente de Sergio pidiendo aumento. Escuché argumentos alegando que un defensa no podía ganar esa cantidad y probablemente no es la costumbre; pero vamos, su labor es igual de importante que la ofensiva y, a mi manera de ver, debería recompensarse igual. Que quizá no es tan vistosa es cierto, pero no por eso es menos valiosa.

Otros argumentan que es un descaro pedir un aumento habiendo tenido una temporada poco vistosa y, quizá, si habría que exigirle también a él una mejora en su rendimiento para darle el aumento. Entiendo perfectamente que en el fútbol cuenta el hoy y no el ayer. 

Personas se muestran indignadas y toman la petición de aumento y el “ofrecerlo” a otros equipos como una ofensa al club y al madridismo. Entiendo que  para miles sería un sueño poder portar la camiseta y sudarla sería el mayor honor (no decir cobrar por hacerlo), mas hay que reconocer que el balompié en esos niveles es un negocio. Un negocio altamente lucrativo y que, por mucha pasión que exista, es un trabajo. El representante, de hacer bien su trabajo, buscará velar por el bienestar económico de su jugador más allá de las pasiones.  Se empeñará en buscar ofertas y en presentar a su jugador a todos los posibles postores. Que los equipos manejan millones y no se quedarán pobres por pagar unos millones más o menos a algún jugador también es bien sabido.  No me entiendan mal, me encantaría que todos los jugadores jugaran solo por pasión al equipo, no obstante es que el fútbol es un negocio y va a conllevar este tipo de negociaciones. Y así como un jugador que se apasione por un equipo probablemente un día tendrá que anotarle un gol en contra porque es su trabajo, también buscará tener una mejor oferta de trabajo o un aumento de salario.

Creo que hay que ver las cosas como son. Primero, el jugador tiene derecho de pedir lo que desee y el club tiene derecho de dárselo o negarlo. Segundo, el Real Madrid no depende ni dependerá jamás de un solo jugador. Nadie es imprescindible y todos son reemplazables, pero sin duda queremos tener siempre a los mejores en nuestras filas. Tercero, el fútbol es un negocio y, nos guste o no, se maneja como tal y cada quien puede manejar su negocio como plaza arriesgándose a las consecuencias (positivas y negativas) de sus actos.

Entiendo que para muchos estas negociaciones y manera de manejarse las cosas pueden parece ofensivo. Yo lo veo diferente, sin pasiones, por lo que es una negociación en donde cada lado velará por sus intereses. Lo que a mí me interesa es que una vez dentro de la cancha el interés sea el mismo. El deseo y el hambre de mejorar y de entregar todo por la camiseta. Creo que los jugadores están en su derecho de pedir el salario que quieran (al igual que uno puede determinar cuándo cree que debería ganar uno en su trabajo) Creo que el club está en su derecho como contratante de aceptar o rechazar la cantidad que el jugador exige, pero sobretodo creo que los afcionados tenemos la obligación y el derecho de exigir al jugador que haga valer cada centavo que se le está pagando.

Yo quiero que Ramos se quede y, por mí, que le paguen lo que pide y de igual forma espero poder deleitarme exigiéndole con sudor que haga valer cada centavo. En caso contrario, pues al final como en cualquier empleo sino da la talla habrá que decir: "bye bye".

A todos nos agradará o desagradará algún jugador. Personalmente le tengo mucha fé a Sergio y creo que siempre ha sido alguien que sabe como levantarse y volar más alto. Creo en un Sergio que a veces manda el penal a la luna, pero luego vuelve para tirarlo a lo Panenka. Creo en un SR4 que tira copas pero que luego se empeña en levantar dos más.  Quiero que Sergio continúe  porque creo que sería beneficioso para el equipo. Porque creo que Ramos es un jugador que cuando cae se levanta con más fuerza y tengo la certeza que aún tenemos mucho que ver de él.

Ante todo quiero lo mejor para el equipo y, hoy por hoy, aunque muchos difieran, para mí el sigue siendo la mejor opción.  Si , yo creo en Sergio Ramos y eso no me hace más o menos madridista. Ante todo quiero el bien del club y sé que el equipo seguirá llenando mi vida de ilusión con o sin Ramos en él, pero hoy creo que Sergio aún tiene un lugar importante dentro del equipo. Creo que debe continuar, creo que va a aportar y creo que será pieza clave varias temporadas más. 

Que viva el Real Madrid, la pasión que genera y el amor inmortal que traspasa tiempos y fronteras.

¡HALA MADRID!

Escrito por "NatiGdeRamos1"