Un Real Madrid condenado al fracaso

Podría haber escrito este post ayer, hace una semana, un mes, o incluso más de un año. Pero mi amor al Real Madrid a veces me obliga a tener paciencia y esperar un cambio de rumbo que nunca sucede. Después de este derbi podemos decir alto y claro que estamos condenados al fracaso.

Florentino sigue siendo un crack de los números, es algo indiscutible, y además muy necesario en un equipo formado por alguno de los mejores jugadores del mundo, o al menos de los mejores pagados. El problema viene cuando desviamos la atención a la parcela deportiva. Es aquí donde Florentino ha tropezado una y otra vez sin aprender nada en todos estos años de presidencia.

Comenzó permitiendo que un grupo de jugadores, entre los que se encontraban capitanes y pesos pesados del vestuario se cargaran un proyecto deportivo comandado por Mourinho. Luego fichó a un entrenador, Ancelotti, al que éstos mismos jugadores manejaban a su antojo, y el cual permaneció más tiempo del necesario única y exclusivamente por un gol que nos dio una Copa de Europa y muchos problemas.

En otro nuevo cambio de rumbo y para demostrar (no se muy bien a quién) que el club no estaba gobernado por unos jugadores más preocupados de sus intereses que de los del equipo, decidió expulsar  al italiano ganándose la enemistad de gran parte del vestuario. A cambio trajo a un entrenador, Benítez, con métodos e ideas desactualizadas para este fútbol moderno y que en este caso, por presión de la prensa deportiva, que le atacaba a diario, tuvo que ser cesado de su puesto.

Y ahora estamos con Zidane, un entrenador al cual le viene muy grande este equipo, y que en mi opinión le viene grande el papel de entrenador, ya que tampoco es que con el Castilla consiguiera unos números y juego fantástico. Pero ante la crisis, que mejor idea que poner de entrenador a uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol, que además cuenta con el cariño de la prensa, que tanto influye en este equipo.



Demasiados entrenadores, cada uno con ideas distintas de juego y sistemas (algunos sin ninguna como Zidane, que lo único que enunció fue que jugaría siempre con la BBC). Una plantilla totalmente desequilibrada, con puestos sin doblar, sin un delantero puro, plagada de mediapuntas y además con jugadores situados en posiciones donde no ofrecen el rendimiento deseado.

Todos son culpables. Desde un presidente que maneja el Real Madrid como si fuera una empresa cualquiera, sobreponiendo las necesidades económicas a las deportivas. Un grupo de entrenadores (exceptuando a Mourinho) que siempre terminaron doblegándose a los deseos del presidente, jugadores y prensa en mayor o menor medida. Finalmente, una plantilla, que debería haber sufrido una gran revolución con la consecución de la "Décima", y que sin embargo, ha sido renovada en gran medida sin merecerlo. Un grupo mayoritario de jugadores con un bagaje de títulos paupérrimo con respecto a lo que se espera del Real Madrid.

Reflexionando sobre esta situación, está claro que tenemos actualmente un Real Madrid condenado al fracaso. Otro año más tirado a la basura (sería un milagro en las condiciones existentes lograr la 11ª Copa de Europa). Pero bueno, llegará el verano, un nuevo entrenador, nuevos cromos, pero seguiremos sin un proyecto deportivo real con el que ganar títulos.

Mirando hacia atrás pienso si no hubiera sido mejor que Florentino hubiera cogido el toro por los cuernos, vendiendo a los capitanes y varios pesos pesados del equipo, manteniendo a Mourinho y construyendo un equipo campeón con una idea clara de fútbol. Hemos perdido unos años muy valiosos por no tomar las decisiones adecuadas, y encima han sido aprovechados por el "enemigo"  para engordar su nómina de títulos. Mientras tanto, Mourinho está disponible aún y la rica liga china estaría encantada de recibir a algunos jugadores que llevan demasiados años ensuciando nuestra camiseta y nuestro escudo.

Autor: @BorjaGarciaZ

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