¡Campeones del mundo por sexta vez!
Solo un año después de hacerse con el quinto título de campeones del mundo, el Real Madrid conquista de nuevo el trofeo. El parche se queda un año más en la camiseta blanca.
Zidane sabe de la importancia que tienen todos y cada uno de los títulos internacionales en este equipo. Las finales no se pueden dejar escapar aquí, eso es una norma, prácticamente. Desde 2000 no perdemos una final europea o mundial.
El Madrid entró bien ante un Gremio que no parecía tener la intención de atacar. Más bien, los brasileños aparentaban querer especular y defender. A pesar de ello, el Madrid no lograba el gol, como viene siendo habitual esta temporada, por falta de efectividad. Se llegó con 0-0 al descanso.
En la segunda parte el guión del encuentro no fue muy distante a lo visto en los primeros 45 minutos. El Madrid seguía atacando, y por inercia, el gol acabó llegando. Como no, el portugués fue el que abrió la lata e hizo saltar de alegría a todo el banquillo. Poco después pudo llegar el segundo de Ronaldo, pero fue anulado por un más que dudoso fuera de juego.
Lo más sorprendente fue como el Gremio no atacaba. Parecía que no iban perdiendo. Se les veía sin ganas, sin sangre. Ni siquiera mostraron un poco de orgullo. El partido fue fácil para los de Zidane, a pesar de que la victoria por la mínima no lo demuestre.
Lo importante: otro más. Y ya son 5 esta temporada, la mejor en la historia del Real Madrid en cuanto a títulos conseguidos. Un día más en la oficina, el Madrid campeón del mundo, y ahora vamos a por más.
Zidane sabe de la importancia que tienen todos y cada uno de los títulos internacionales en este equipo. Las finales no se pueden dejar escapar aquí, eso es una norma, prácticamente. Desde 2000 no perdemos una final europea o mundial.
El Madrid entró bien ante un Gremio que no parecía tener la intención de atacar. Más bien, los brasileños aparentaban querer especular y defender. A pesar de ello, el Madrid no lograba el gol, como viene siendo habitual esta temporada, por falta de efectividad. Se llegó con 0-0 al descanso.
En la segunda parte el guión del encuentro no fue muy distante a lo visto en los primeros 45 minutos. El Madrid seguía atacando, y por inercia, el gol acabó llegando. Como no, el portugués fue el que abrió la lata e hizo saltar de alegría a todo el banquillo. Poco después pudo llegar el segundo de Ronaldo, pero fue anulado por un más que dudoso fuera de juego.
Lo más sorprendente fue como el Gremio no atacaba. Parecía que no iban perdiendo. Se les veía sin ganas, sin sangre. Ni siquiera mostraron un poco de orgullo. El partido fue fácil para los de Zidane, a pesar de que la victoria por la mínima no lo demuestre.
Lo importante: otro más. Y ya son 5 esta temporada, la mejor en la historia del Real Madrid en cuanto a títulos conseguidos. Un día más en la oficina, el Madrid campeón del mundo, y ahora vamos a por más.
No hay comentarios