España 1982
Luego de Uruguay, Italia, Francia, Brasil, Suiza, Suecia, Chile, Inglaterra, México, Alemania y Argentina; el turno era para España, la edición número 12 de la Copa mundial de la FIFA se disputaría en suelo ibérico. El torneo se ampliaba para dar cupo a 24 seleccionados, que se segmentarían en 6 grupos de 4 equipos y clasificarían los 2 primeros de cada grupo. En esta ocasión, fue la primera vez en la que participaban seleccionados de todos los continentes del globo. Alemania Federal, Austria, Bélgica, Checoslovaquia, Escocia, Francia, Hungría, Inglaterra, Irlanda del Norte, Italia, Polonia, Yugoslavia y la Unión Soviética se sumaron a España como representantes del viejo continente. Acompañando a Argentina, Brasil, Chile y Perú clasificaron en CONMEBOL. El Salvador y Honduras dieron la campanada en CONCACAF y dejaron sin mundial al conjunto mexicano. Camerún, Argelia, Kuwait y Nueva Zelanda fueron los que se impusieron en África, Asia y Oceanía, siendo la primera clasificación para todos ellos.
El Grupo 1 presentó un detalle curioso, en las 2 primeras
jornadas se dieron solo empates; dejando a Italia, Polonia, Perú y Camerún
empatados con 2 unidades. En la tercera fecha, Polonia se aseguró de golear a
Perú; mientras Italia se clasificó con un 1-1 ante Camerún que los dejaba
empatados con 3 puntos derivados de 3 empates, pero dando la clasifcación a
italianos debido a que sumaban 2 goles a favor, mientras que los cameruneses
anotaron solo 1.
Igualmente dificil, pero con mucha polémica fue la clasificación alemana. Los teutones salieron derrotados ante Argelia, lo que les complicó la clasificación a pesar de la victoria sobre Chile en la fecha 2. Austria había logrado 2 victorias y dependía de sí mismo para clasificar, dejando a Alemania y Argelia empatados en la segunda posición. La tercera fecha mostró la victoria africana sobre Chile, dejando a los argelíes empatados con los austriacos pero con menos diferencia de goles. Alemania debía ganar para superar a ambos, mientras que Austria podía perder por 2 goles, una diferencia mayor lo dejaba fuera de la Copa. Sabiendo lo que necesitaban, los alemanes anotaron a los 10 minutos y desde ese momento, El Molinón presenció un arreglo tácito entre ambas escuadras, que prefirieron dejar de jugar para clasificar y dar un espectáculo sin emoción alguna durante 80 minutos.
Passarella, Bertoni, Ardiles y Maradona, que sí participó en esta ocasión, anotaron en las 2 victorias argentinas en el Grupo 3. Grupo en el que clasificaron por detrás de Bélgica; eliminando a Hungría y El Salvador. Entre estos últimos se dio la goleada más abultada de la historia de los mundiales, el 10-1 en Elche.
Inglaterra y Francia se impusieron con facilidad en el Grupo 4, pero con una anécdota que será difícil olvidar. El jeque Fahid Al-Ahmad Al-Sabah, presidente de la federación kuwaití bajó al gramado del José Zorrilla para pedir explicaciones al arbitro, amenazando con retirar el equipo que dirigía Carlos Alberto Parreira. El colegiado dio la derecha y decidió revertir la decisión, algo que influyó poco en el devenir del encuentro, que finalizó con goleada a favor del equipo liderado por Michel Platini.
La victoria española, con gol de Juanito, sobre Yugoslavia, terminó significando su clasificación junto a Irlanda del Norte en el Grupo 5.
Zico, Socrates y Falcao destacaron sobre el resto en el Grupo 6, ahí la canarinha anotó 10 goles para conseguir victorias sobre la URSS, Nueva Zelanda y Escocia, clasificando junto a soviéticos.
Los 12 clasificados formarían 4 grupos de 3 equipos, para dar paso a los ganadores de cada grupo en una semfinal.
Grzegorz Lato seguía de referencia en Polonia, los comandó en aquel cuarto lugar de 1974 y seguía aportando en el seleccionado. En esta oportunidad no estaban acompañado de Deyna, pero sí de Boniek. El atacante anotó 3 ante Bélgica y sumado al Polonia 0-0 URSS, significó que los polacos vencieran el Grupo A de la segunda fase.
Con victoria sobre España y empate ante Inglaterra, Alemania Federal selló su pase en el Grupo B, cuyos partidos fueron disputados en el Bernabéu, certificando la eliminación de los dueños de casa.
El Grupo C fue el más entretenido, allí llegó Italia para vencer a Argentina con goles de Tardelli y Cabrini a pesar del tanto de Passarella, en un partido recordado por el duro marcaje de Claudio Gentile sobre Maradona, utilizando su sapiencia y sobretodo su dureza para anular al astro argentino. En el segundo encuentro, una constelación de estrellas se daba cita en el Argentina-Brasil: Passarella, Maradona, Bertoni, Tarantini, Zico, Sócrates, Falcao, Toninho Cerezo; esperabamos fútbol pero en el clásico suramericano se cayeron a patadas. Entre tantos golpes, resaltó el Maradona, que provocó su expulsión. Prevalecieron los goles de Zico, Serginho y Junior; con este 3-1, la verdeamarelha enfilaba al partido definitivo ante Italia con la ventaja en diferencia de goles, por lo que un empate ante la azzurra, lo clasificaba.
Es aquí cuando paramos y damos un vistazo al fútbol italiano en el año 1980. En la temporada 79/80, la policía italiana sacó a la luz lo que se conoció como el Totonero, una red de apuestas clandestinas que involucraban presidentes, dirigentes, entrenadores y jugadores de la máxima categoría del calcio. Entre decenas de nombres aparecía Paolo Rossi, el delantero que brilló en Argentina 78, militaba en el Perugia y estuvo inmiscuido en el tema del Totonero, provocando una sanción de 2 años sin poder jugar. A pesar de pasar tanto tiempo sin jugar, el DT de la Nazionale, Enzo Bearzot, apostó por Pablito para jugar en la cita mundialista. Rossi pasó 4 partidos en blanco, pero contra Brasil grabó su nombre en una de las paginas más importantes del deporte. La azzurra necesitaba ganar para trascender y todo comenzaba bien con el gol de Paolo, hasta que Sócrates empató. De nuevo Rossi se hizo presente y dio la ventaja a los suyos, pero Falcao niveló el marcador. En el minuto 74 Paolo Rossi completó la faena y anotó su tercer gol del partido para dar los 3 puntos y la clasificación a los suyos, quienes apoyados en la férrea defensa y en Dino Zoff, detuvieron el magnífico fútbol que practicaban los dirigidos por Telé Santana. Luego del mundial, Rossi pasó a formar parte de la Juventus, acompañando a Zoff, Scirea, Cabrini, Gentile, Tardelli, Platini y Boniek.
El último clasificado a las semifinales fue Francia, quien ganó tanto a Austria como a Irlanda del Norte para meterse entre los mejores 4, que por primera vez desde 1966, eran 4 seleccionados europeos.
Igualmente dificil, pero con mucha polémica fue la clasificación alemana. Los teutones salieron derrotados ante Argelia, lo que les complicó la clasificación a pesar de la victoria sobre Chile en la fecha 2. Austria había logrado 2 victorias y dependía de sí mismo para clasificar, dejando a Alemania y Argelia empatados en la segunda posición. La tercera fecha mostró la victoria africana sobre Chile, dejando a los argelíes empatados con los austriacos pero con menos diferencia de goles. Alemania debía ganar para superar a ambos, mientras que Austria podía perder por 2 goles, una diferencia mayor lo dejaba fuera de la Copa. Sabiendo lo que necesitaban, los alemanes anotaron a los 10 minutos y desde ese momento, El Molinón presenció un arreglo tácito entre ambas escuadras, que prefirieron dejar de jugar para clasificar y dar un espectáculo sin emoción alguna durante 80 minutos.
Passarella, Bertoni, Ardiles y Maradona, que sí participó en esta ocasión, anotaron en las 2 victorias argentinas en el Grupo 3. Grupo en el que clasificaron por detrás de Bélgica; eliminando a Hungría y El Salvador. Entre estos últimos se dio la goleada más abultada de la historia de los mundiales, el 10-1 en Elche.
Inglaterra y Francia se impusieron con facilidad en el Grupo 4, pero con una anécdota que será difícil olvidar. El jeque Fahid Al-Ahmad Al-Sabah, presidente de la federación kuwaití bajó al gramado del José Zorrilla para pedir explicaciones al arbitro, amenazando con retirar el equipo que dirigía Carlos Alberto Parreira. El colegiado dio la derecha y decidió revertir la decisión, algo que influyó poco en el devenir del encuentro, que finalizó con goleada a favor del equipo liderado por Michel Platini.
La victoria española, con gol de Juanito, sobre Yugoslavia, terminó significando su clasificación junto a Irlanda del Norte en el Grupo 5.
Zico, Socrates y Falcao destacaron sobre el resto en el Grupo 6, ahí la canarinha anotó 10 goles para conseguir victorias sobre la URSS, Nueva Zelanda y Escocia, clasificando junto a soviéticos.
Zico y Sócrates. |
Los 12 clasificados formarían 4 grupos de 3 equipos, para dar paso a los ganadores de cada grupo en una semfinal.
Grzegorz Lato seguía de referencia en Polonia, los comandó en aquel cuarto lugar de 1974 y seguía aportando en el seleccionado. En esta oportunidad no estaban acompañado de Deyna, pero sí de Boniek. El atacante anotó 3 ante Bélgica y sumado al Polonia 0-0 URSS, significó que los polacos vencieran el Grupo A de la segunda fase.
Con victoria sobre España y empate ante Inglaterra, Alemania Federal selló su pase en el Grupo B, cuyos partidos fueron disputados en el Bernabéu, certificando la eliminación de los dueños de casa.
El Grupo C fue el más entretenido, allí llegó Italia para vencer a Argentina con goles de Tardelli y Cabrini a pesar del tanto de Passarella, en un partido recordado por el duro marcaje de Claudio Gentile sobre Maradona, utilizando su sapiencia y sobretodo su dureza para anular al astro argentino. En el segundo encuentro, una constelación de estrellas se daba cita en el Argentina-Brasil: Passarella, Maradona, Bertoni, Tarantini, Zico, Sócrates, Falcao, Toninho Cerezo; esperabamos fútbol pero en el clásico suramericano se cayeron a patadas. Entre tantos golpes, resaltó el Maradona, que provocó su expulsión. Prevalecieron los goles de Zico, Serginho y Junior; con este 3-1, la verdeamarelha enfilaba al partido definitivo ante Italia con la ventaja en diferencia de goles, por lo que un empate ante la azzurra, lo clasificaba.
Es aquí cuando paramos y damos un vistazo al fútbol italiano en el año 1980. En la temporada 79/80, la policía italiana sacó a la luz lo que se conoció como el Totonero, una red de apuestas clandestinas que involucraban presidentes, dirigentes, entrenadores y jugadores de la máxima categoría del calcio. Entre decenas de nombres aparecía Paolo Rossi, el delantero que brilló en Argentina 78, militaba en el Perugia y estuvo inmiscuido en el tema del Totonero, provocando una sanción de 2 años sin poder jugar. A pesar de pasar tanto tiempo sin jugar, el DT de la Nazionale, Enzo Bearzot, apostó por Pablito para jugar en la cita mundialista. Rossi pasó 4 partidos en blanco, pero contra Brasil grabó su nombre en una de las paginas más importantes del deporte. La azzurra necesitaba ganar para trascender y todo comenzaba bien con el gol de Paolo, hasta que Sócrates empató. De nuevo Rossi se hizo presente y dio la ventaja a los suyos, pero Falcao niveló el marcador. En el minuto 74 Paolo Rossi completó la faena y anotó su tercer gol del partido para dar los 3 puntos y la clasificación a los suyos, quienes apoyados en la férrea defensa y en Dino Zoff, detuvieron el magnífico fútbol que practicaban los dirigidos por Telé Santana. Luego del mundial, Rossi pasó a formar parte de la Juventus, acompañando a Zoff, Scirea, Cabrini, Gentile, Tardelli, Platini y Boniek.
El último clasificado a las semifinales fue Francia, quien ganó tanto a Austria como a Irlanda del Norte para meterse entre los mejores 4, que por primera vez desde 1966, eran 4 seleccionados europeos.
Zoff, Graziani, Conti, Collovati, Scirea, Gentile, Bergomi, Rossi, Oriali, Cabrini y Tardelli. |
Los cruces depararon que les bleus intentarían conseguir el boleto a Madrid para disputar la final ante Alemania Federal y Karl-Heinz Rummenigge, el 2 veces Balón de Oro iniciaba el encuentro en el banquillo tras una lesión en el duelo frente a España.
Littbarski y Michel Platini, anotaron para enviar el partido al tiempo extra tras dejar helados a los presentes en el Sánchez Pizjuán, con la entrada del golero alemán Harald Schumacher, quien arrolla al recién ingresado Patrick Battiston. Battiston salió del encuentro en camilla y con 2 dientes menos, mientras que el referee no pitó ni falta. En la prórroga Mario Tressor marca un golazo y Giresse amplió la ventaja gala, pero Alemania nunca se rinde, nunca lo ha hecho. Rummenigge, quien entró al minuto 97, descontó al 102 y Fischer empató las acciones. Eso significaba que se daría inicio al punto más dramático del fútbol, la tanda de penales se utilizaría por primera vez para resolver un desempate en un mundial. Alain Giresse tuvo el honor de patear y marcar el primero. El quinto penal para cada equipo llegó con un 3-3, ambos habían dejado a sus estrellas para el final y no decepcionaron; Rummenigge y Platini cumplieron y la tanda seguía, pero Schumacher ataja su segundo penal de la noche y Horst Hrubresch deposita a los germanos a la final del mundo.
Por el otro costado aparecía Grzegroz Lato y Polonia, quienes quedarían diesmados por la ausencia de Boniek por acumulación de amarillas. Esto ayudó a que la granítica defensa italiana volviera a demostrar sus dotes. Gaetano Scirea, maravilloso defensor que tomó la posta desde el retiro de Beckenbauer, siendo el referente a nivel mundial del líbero, que poseía una técnica magnífica para jugar, además de su inteligencia defensiva. Junto a Scirea estaban Gentile, Bergomi y Collovati, mientras que Cabrini iba y venía siempre por el costado izquierdo. Conti, Tardelli y Orialli apuntalaban la defensa y llegaban al área rival al momento de atacar.Un ataque italiano que estaba formado por Graziani y Paolo Rossi, quien tras su histórico partido ante Brasil, volvió a llevarse las portadas vs. Polonia. Paolo marcó los 2 únicos tantos del encuentro, lo que se tradujo en que Italia, al igual que Alemania, disputaría su cuarta final de un campeonato mundial de la FIFA, en la que ambos buscarían estampar su tercer título sobre sus escudos.
El trío polaco volvería a juntarse en el partido ante Francia, igualando lo conseguido 8 años antes, una meritoria tercera plaza.
Paolo Rossi celebrando la apertura del marcador ante Polonia. |
El Santiago Bernabéu recibiría 90000 personas para presenciar la final, un encuentro que dominó Italia desde el inicio, cuyo sistema con 5 defensores provocó que los alemanes no pudieran iniquietar en demasía. Giuseppe Bergomi y Gaetano Scirea sacaron lo mejor de sí en el aspecto defensivo y haciendo jugar desde atrás. La azzurra pudo adelantarse en la primera etapa, pero Cabrini desaprovechó un tiro penal, el dominio italiano no mermó y de hecho perduró hasta la segunda etapa, en la que Paolo Rossi adiciona el sexto tanto a su cuenta personal en la copa. Lo que valió la Bota de oro y el Balón de oro del torneo, que se comenzaron a entregar en esta edición, además del Balón de oro del año. Marco Tardelli duplicó la ventaja azzurra y provocó su imborrable celebración. Alessandro Altobelli ingresó por la lesión de Graziani y firmó el tercer tanto para que el presidente Italiano Sandro Pertini celebrara en el palco del Santiago Bernabéu. Un feudo que el ex-Real Madrid, Paul Breitner, conocía a la perfección y ahí descontó para Alemania, uniéndose así a la selecta lista que conformaban Vavá y Pelé, era apenas el tercer jugador que anotaba en 2 finales de la Copa del Mundo.
La anotación de Breitner no fue suficiente, la Nazionale volvía a tocar el cielo, 44
años después de aquella tarde parisina en la que, bajo la tutela de Pozzo, se
adjudicaban su segunda estrella. Sin Pozzo, pero con Bearzot al mando y con
jugadores que tienen un sitial de honor en el calcio, apellidos como Zoff, que con 40 años alzaba la Copa del
Mundo.
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