Suecia 1958
Luego de la Copa en Suiza, el mundo comprobó
que el fútbol, al menos en el césped, se alejaba de las heridas todavía
abiertas que dejaron las últimas décadas tan convulsivas en Europa. Basándose
en ello, e implementando la idea de Don Santiago Bernabéu, se creó la Copa de
campeones de Europa en 1955. En ella participarían los campeones de las
principales ligas Europeas, por lo que el Real Madrid representó a España en
esa primera edición para alzar el trofeo gracias a un magnífico Alfredo Di
Stefano. La saeta rubia no jugaba solo, contaba con jugadores memorables,
estrellas que tenían luz propia y que siguen brillando en los recuerdos y
relatos de los mayores. Raymond Kopa era uno de esos grandes escuderos con los
que contaba Di Stefano, el pequeño francés lideraba a una selección gala que
daría mucho de qué hablar y que partía como uno de los favoritos para levantar
la Copa en el venidero mundial sueco. Alfredo Di Stefano no pudo jugar los 2
mundiales anteriores debido a los problemas de la AFA, que no participaron en
las respetivas eliminatorias y en esta ocasión, ya con España, no se clasificó
a pesar de contar con una gran parte de los futbolistas del Real Madrid que ya sumaban
3 Copas de Europa; resaltando Paco Gento y Don Alfredo, que era el actual Balón
de Oro. También Kubala y Luis Suarez representaban a esta selección que salió
segunda en su grupo y se quedó fuera en detrimento de Escocia.
Sí clasifico Inglaterra, con el primer Balón
de Oro, Stanley Matthews, a la cabeza de un grupo muy golpeado en calidad y
sobretodo anímicamente. El desastre aéreo de Múnich dejó 23 fallecidos, entre
ellos 8 jugadores del Manchester United, que volvía el FECHA de un partido de
la Copa de Europa ante el Bayern, dejando huérfano a un equipo que prometía
mucho y privando al fútbol de ver el crecimiento que prometía tener Duncan
Edwards.
Durante otro viaje por la Copa de Europa, nos quedamos sin una de las selecciones que podían coronarse en tierras escandinavas. Hungría podría haber estado en este grupo de potencias europeas que apuntaban alto, pero la política se hacía presente y el fútbol lo sufría. El Honved de Budapest, gracias al reclutamiento militar, contaba con Puskás, Kocsis y Czibor entre sus jugadores. Ellos dominaban en tierras magiares y en Europa se codeaban con los gigantes del continente, en un partido en Bilbao por la segunda Copa de Europa, los jugadores del Honved decidieron no volver a la a su país y alejarse de la invasión soviética en Hungría; saliendo de la selección la mayoría de ellos.
Durante otro viaje por la Copa de Europa, nos quedamos sin una de las selecciones que podían coronarse en tierras escandinavas. Hungría podría haber estado en este grupo de potencias europeas que apuntaban alto, pero la política se hacía presente y el fútbol lo sufría. El Honved de Budapest, gracias al reclutamiento militar, contaba con Puskás, Kocsis y Czibor entre sus jugadores. Ellos dominaban en tierras magiares y en Europa se codeaban con los gigantes del continente, en un partido en Bilbao por la segunda Copa de Europa, los jugadores del Honved decidieron no volver a la a su país y alejarse de la invasión soviética en Hungría; saliendo de la selección la mayoría de ellos.
Los que acompañaron a suecos en su torneo
fueron Austria, Checoslovaquia, Escocia, Francia, Gales, Hungría, Inglaterra,
Unión Soviética y Yugoslavia por Europa; Argentina, Brasil, México y Paraguay.
También llegaba Alemania Federal, que mantenía una base de jugadores que se
coronaron en Suiza, pero sin Ottmar Walter. Fritz Walter, su capitán quedaba
como el gran estandarte, pero fue Helmut Rahn el que tomó la batuta y anotando
4 goles en los 3 partidos del Grupo 1, le dio el pase a los suyos. En dicho grupo
también clasificó la debutante Irlanda del Norte, dejando fuera a argentinos y
checoslovacos.
También Francia ganó su grupo, viendo a Kopa dominar los ataques por su costado y con sus incansables movimientos hacia el centro; además de los goles de Just Fontaine, quien sumó 6 tantos ante Escocia, Yugoslavia y Paraguay en el grupo 2. Grupo en el que logró avanzar Yugoslavia por detrás de los galos.
Suecia y Gales clasificaron fácilmente al estar emparejados con Hungría y México en el grupo 3.
En el grupo 4 apareció Brasil, dirigida por Vicente Feola, un equipo que manejaba Didí desde el medio, con Djalma y Nilton Santos cabalgando por las bandas, ahí se veía a Vavá marcando goles y a Garrincha desequilibrar con sus innumerables regates por la derecha. 2 tantos de Altafini propiciaron la victoria sobre Austria junto al inolvidable gol de Nilton Santos, mientras que Vavá anotó 2 para vencer a la URSS, completando su calendario con el 0-0 ante Inglaterra, primer partido sin goles en la historia de los mundiales.
También Francia ganó su grupo, viendo a Kopa dominar los ataques por su costado y con sus incansables movimientos hacia el centro; además de los goles de Just Fontaine, quien sumó 6 tantos ante Escocia, Yugoslavia y Paraguay en el grupo 2. Grupo en el que logró avanzar Yugoslavia por detrás de los galos.
Suecia y Gales clasificaron fácilmente al estar emparejados con Hungría y México en el grupo 3.
En el grupo 4 apareció Brasil, dirigida por Vicente Feola, un equipo que manejaba Didí desde el medio, con Djalma y Nilton Santos cabalgando por las bandas, ahí se veía a Vavá marcando goles y a Garrincha desequilibrar con sus innumerables regates por la derecha. 2 tantos de Altafini propiciaron la victoria sobre Austria junto al inolvidable gol de Nilton Santos, mientras que Vavá anotó 2 para vencer a la URSS, completando su calendario con el 0-0 ante Inglaterra, primer partido sin goles en la historia de los mundiales.
Arriba: Feola, Djalma Santos, Zito, Bellini, Nilton Santos, Orlando, Gilamar. Abajo: Garrincha, Didí, Pelé, Vavá y Zagallo. |
Los Cuartos de Final empezaron el 19 de junio
y en Gotemburgo apareció un niño de 17 años y 239 días, anotando al minuto 66
un golazo, su primero en las Copas del Mundo; un tanto que sigue siendo
recordado porque nadie más joven ha anotado en un mundial. Ese niño brasileño
era nada menos que Pelé, cuyo solitario gol eliminó a John Charles y su
selección galesa. La fiesta de Francia continuaba y tras su goleada a Irlanda
del Norte, se clasificaba a semifinales sumando 16 goles en los 4 encuentros.
Helmut Rahn seguía anotando goles que agrandaban su leyenda, guiando a los germanos a las semifinales del campeonato en Suecia con su gol ante Yugoslavia. En esas semis, la RFA se mediría al conjunto local, Suecia eliminó a la Unión Soviética y se plantaba entre los 4 mejores.
Helmut Rahn seguía anotando goles que agrandaban su leyenda, guiando a los germanos a las semifinales del campeonato en Suecia con su gol ante Yugoslavia. En esas semis, la RFA se mediría al conjunto local, Suecia eliminó a la Unión Soviética y se plantaba entre los 4 mejores.
Los escandinavos contaba con Nils Liedholm y
Gunnar Gren, históricos jugadores del AC Milan y fue el segundo quien desbalanceó
la historia ante los alemanes. Schafer abrió el marcador y Skoglund empató,
esto sirvió de entrada para que Gren coloque el 2-1 al minuto 81 ante más de
50000 personas en Gotemburgo. De nuevo habría un local en una final, pero para
lograr la gesta se tendría que medir al ganador entre Brasil y Francia.
Vavá y Fontaine empezaron con todo el duelo de goleadores, anotando ambos para colocar el 1-1 antes de que Didí adelantara a los amazónicos. Todo seguía peleado, con Kopa y Garrincha intentando desde los costados, pero el que brilló verdaderamente fue Pelé. A los minutos 52, 64 y 75 escribió su nombre en el tanteador, 3 goles que sepultaron las esperanzas francesas y dándole al mundo una muestra de lo que significaría Edson Arantes do Nascimento.
Just Fontaine marcó 4 tantos y Kopa otro para Francia, mientras que los históricos Rahn y Schafer sacaron la cara por la República Federal Alemana, quienes terminaron perdiendo por 6-3 el partido por el tercer lugar, dando cierre a la generación que se consagró en Suiza. Fontaine se iría con 13 goles de esa copa, algo que nadie ha logrado hasta el momento; mientras que Raymond Kopa conseguiría el Balón de Oro meses después.
Vavá y Fontaine empezaron con todo el duelo de goleadores, anotando ambos para colocar el 1-1 antes de que Didí adelantara a los amazónicos. Todo seguía peleado, con Kopa y Garrincha intentando desde los costados, pero el que brilló verdaderamente fue Pelé. A los minutos 52, 64 y 75 escribió su nombre en el tanteador, 3 goles que sepultaron las esperanzas francesas y dándole al mundo una muestra de lo que significaría Edson Arantes do Nascimento.
Just Fontaine marcó 4 tantos y Kopa otro para Francia, mientras que los históricos Rahn y Schafer sacaron la cara por la República Federal Alemana, quienes terminaron perdiendo por 6-3 el partido por el tercer lugar, dando cierre a la generación que se consagró en Suiza. Fontaine se iría con 13 goles de esa copa, algo que nadie ha logrado hasta el momento; mientras que Raymond Kopa conseguiría el Balón de Oro meses después.
Raymond Kopa y Just Fontaine. |
El 29 de junio de 1958, a las 15:00 en Solna, Nils Liedholm hizo gritar a los
suecos como nunca antes había sucedido en un estadio de futbol. Suecia se
adelantaba ante Brasil en la final; un combinado carioca que destilaba
brillantez en el 4-2-4; con Djalma Santos y Nilton Santos por las bandas llegando a
fondo siempre; Bellini y Orlando en la defensa central. Didí
y Zito manejaban en el medio, Garrincha y Zagallo jugaban de punteros para
dejar por dentro a Pelé y a Vavá. Fue este último quien le dio la vuelta al
marcador apenas pasada la media hora. En ese 29 de junio, Pelé marcó uno de los
goles de mayor virtud técnica que se han visto. El control con la marca de
Bergmark y sombrero a Bjoresson para luego definir de volea con la derecha. Una
obra de arte que dejaba 3-1 la historia; Zagallo agrandó las distancias y
Simonsson descontó para que Pelé anotara de cabeza y cerrar con broche de oro
la tarde en la nación escandinava.
Fue él, un chico de 17 años el que tras
exponerse con su magia, inteligencia y magnificencia, le dio su primer cetro mundial a un país que
vibra por este deporte y que desde ese momento veneró a Pelé, junto a todo el mundo se rindieron ante la ascensión al trono que desde entonces ha pertenecido a él, convirtiendo a Pelé en O'Rei. Fue ahí donde se coronó, en Solna, con lágrimas en los ojos y sobre los hombros de sus compañeros.
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