Real Madrid 3-0 Roma: Primer paso para volver a hacer historia

Volvía la Champions al Bernabéu. La competición del Real Madrid, la que ha ganado en ya trece ocasiones. La que para muchos, ya es prácticamente una versión del 'Trofeo Santiago Bernabéu'. En el feudo madridista habían ganas de competición europea y se notó en el equipo por un lado, y por otro en la afición.

La noche europea en la capital española empezaba con una novedad, el horario. Quince minutos se retrasaban de las clásicas 20:45, cuando el árbitro dio el pitido inicial del encuentro. En las alineaciones anunciadas justo antes del salto de los jugadores al terreno de juego, la afición madridista brindó un caluroso homenaje a Kostas Manolas, quién fue el héroe de la Roma en la eliminación al Barcelona la temporada pasada. En la alineación local, Lopetegui sorprendió al dar la titularidad de nuevo al portero costarricense, Keylor Navas.

Una vez iniciado el encuentro, se vio a un Madrid con hambre, ya que salió a buscar el primer gol desde el primer minuto, con mucha ansia. Aún así, Gareth Bale y Karim Benzema no estuvieron tan acertados como esperaban. Fue en el último minuto de la primera mitad, cuando el malagueño, Isco Alarcón, abrió la lata tras un gran golpeo de libre directo a la frontal del área. El resultado al descanso fue de 1-0, con la moral de los blancos por las nubes en lo que fue un gol muy importante, moralmente hablando.

En la segunda parte iban a llegar los mejores minutos del equipo madrileño en lo que va de temporada, probablemente. Tras un gran pase de Modrić, Gareth Bale no iba a desaprovechar la ocasión de anotar el segundo tanto de la noche. La tranquilidad se hacía notar en el Bernabéu. Aún así, los italianos no se dieron por vencidos y mantuvieron la fe, ya que dispusieron de varias ocasiones. Keylor superó con creces las expectativas, atajando todos los disparos a puerta que le llegaron.

Los tres jugadores que entraron al terreno de juego en la segunda mitad fueron: Asensio, Mariano y Ceballos. Asensio cuajó un gran partido, incluso pudo llevarse uno o dos goles, tras grandes jugadas realizadas por él mismo.

Pero sin duda el cambio más esperado por el madridismo fue el de Mariano. El canterano redebutaba con su club, y lo hizo de la mejor manera posible. No solo fue la gran jugada que realizó nada más saltar al césped, ni las ganas con las que luchaba cada balón, ni siquiera esa garra que le hace presionar como ningún otro delantero. Fue el golazo que anotó en el descuento, justo después de haber sido ovacionado por la grada blanca. Un auténtico trallazo por la escuadra desde fuera del área, cerró el gran partido del Madrid en Champions.

El objetivo es claro. Llegar a la final, que sería más especial aún debido a que es en nuestra ciudad. Finalizadas las celebraciones de la decimotercera, toca pensar en la decimocuarta, en el Wanda Metropolitano.


No hay comentarios

Con la tecnología de Blogger.